jueves, 16 de octubre de 2008

SER FELIZ

Imagen: Los Roques/ Venezuela


Cuenta la leyenda que un hombre oyó decir que la felicidad era un tesoro. A partir de aquel instante comenzó a buscarla.

Primero se aventuró por el placer y por todo lo sensual, luego por el poder y la riqueza, después por la fama y la gloria, y así fue recorriendo el mundo del orgullo, del saber, de los viajes, del trabajo, del ocio y de todo cuanto estaba al alcance de su mano.
En un recodo del camino vio un letrero que decía:
"Le quedan dos meses de vida".
Aquel hombre, cansado y desgastado por los sinsabores de la vida se dijo:

- Estos dos meses los dedicaré a compartir todo lo que tengo de experiencia, de saber y de vida con las personas que me rodean.

Y aquel buscador infatigable de la felicidad, sólo al final de sus días, encontró que en su interior, en lo que podía compartir, en el tiempo que le dedicaba a los demás, en la renuncia que hacía de sí mismo por servir, estaba el tesoro que tanto había deseado.

Comprendió que para ser feliz se necesita amar; aceptar la vida como viene; disfrutar de lo pequeño y de lo grande; conocerse a sí mismo y aceptarse así como se es; sentirse querido y valorado, pero también querer y valorar; tener razones para vivir y esperar y también razones para morir y descansar.

Entendió que la felicidad brota en el corazón, con el rocío del cariño, la ternura y la comprensión. Que son instantes y momentos de plenitud y bienestar; que está unida y ligada a la forma de ver a la gente y de relacionarse con ella; que siempre está de salida y que para tenerla hay que gozar de paz interior.

Finalmente descubrió que cada edad tiene su propia medida de felicidad y que sólo Dios es la fuente suprema de la alegría, por ser ÉL: amor, bondad, reconciliación, perdón y donación total.
Y en su mente recordó aquella sentencia que dice: "Cuánto gozamos con lo poco que tenemos y cuánto sufrimos por lo mucho que anhelamos."
Ser Feliz, es una actitud.
"Cada hombre tiene un tesoro que lo está esperando"

De "El Alquimista" - Paulo Coelho.


4 comentarios:

La ingeniero dijo...

me encanta paulo coelho
muy bueno
saludos!!

Anónimo dijo...

..Buen Post Caminante. Pensamos que la Felicidad es una quimera, imposible de alcanzar, cuando en realidad es mucho más simple de lograr, lo que pasa es que antes tenemos que empezar por nosotros mismos!
Saludos!

Anónimo dijo...

Fher...
Gracias.

No creo que siquiera logres imaginar lo que significó verte ahí. Mi vida ha sido una secuencia inesperada de mil vueltas, donde inevitablemente he sentido que me he quedado sin piso sobre el que posar mis pies, pero ahi voy, reconstruyendo mis pedazos...

Gracias por ser tan tú, consecuente, dulce y presente.. tu gesto ha tocado mi alma y me ha conmovido profundamente!

Lastima que no tengo tu correo, perdí todo o que tenia en esa cuenta, sin embargo estoy convencida que el afecto verdadero perdura toda la vida.

Un beso inmenso.
Monica

Fernando dijo...

A todos, gracias por dejar su valiso punto de vista, y enriquecer este espacio.

Y para ti Monica , como dice una cancion, un amigo es para siempre, puedes dejar tu nueva direccion en mi direccion de mails que esta en el blog, espero seguir disfrutando de tus letra y amistad!